Si estás pensando con qué platos sorprender en las comidas que nos esperan, te proponemos una deliciosa receta de marisco y hojaldre: pastelitos rellenos de gambas cajún.
Puedes prepararla con antelación ya que estará igual de rica que recién hecha, como las masas Buitoni no se rompen durante el horneado y suben de forma homogénea, el triunfo está asegurado.
Cada vez nuestros paladares se internacionalizan más con sabores de todas las partes del mundo. La comida cajún, originaria de Louisiana, es un ejemplo. Y las especias cajún una de sus referencias. No es muy común, aunque tampoco infrecuente encontrar estas especias en los mercados, pero son muy sencillas de preparar y en casa podemos darles un toque muy personal. Vamos paso a paso.
Ingredientes
Ingredientes: 2 masas de hojaldre rectangular Buitoni, 100 gr de cebolla, 100 gr de pimiento rojo, 100 gr de pimiento verde, 1 cucharada de tomate frito, 250 gr de gamba arrocera, 1 cucharadita de especias cajún, 1 huevo, sésamo, sal y AOVE (aceite de oliva virgen extra).
Ingredientes para las especias cajún: 2 cucharaditas de pimentón dulce, 1 cucharadita de comino molido, 1 cucharadita de tomillo, 1 cucharadita de cebolla en polvo, 1 cucharadita de orégano, 1/2 cucharadita de pimienta negra molida, 1/2 cucharadita de pimienta blanca, 1/2 cucharadita de cayena.
Cómo preparar los pastelitos de hojaldre rellenos de gambas cajún
Preparación de las especias cajún: Es recomendable prepararlas al menos con 24 horas de antelación para que la mezcla adquiera su propia esencia. Para ello, mezclamos todas las especias y si podemos, las pulverizamos con la ayuda de un molinillo. Guardamos en un bote hermético hasta su uso.
Preparación de los pastelitos:
Pelamos las gambas arroceras, añadimos media cucharada de AOVE y media cucharadita de especias cajún, mezclamos y reservamos.
Pelamos la cebolla y la troceamos en daditos tan pequeños como nos sea posible. Podemos ayudarnos de una picadora. Lavamos y troceamos el pimiento rojo y el pimiento verde del mismo tamaño que la cebolla.
Pochamos en una sartén las verduras hasta que estén cocinadas. A continuación, añadimos el tomate frito y media cucharadita de especias cajún, cocinamos 3-4 minutos más y dejamos enfriar.
En otra sartén, salteamos las gambas junto con la marinada que hemos preparado, reservamos.
Si al enfriarse las verduras vemos que hay un exceso de aceite, las ponemos en un colador para eliminar el sobrante.
Extendemos una lámina de hojaldre y con ayuda de un cortador circular vamos recortando las bases. Utilizando un aro de 8 cm de diámetro salen 11 pastelitos en total. Marcamos ligeramente la masa para poder rellenar. No hace falta que cortemos del todo, solo queremos marcar los pastelitos para poder rellenarlos.
Precalentamos el horno a 200º.
Rellenamos cada pastelito con una cucharadita de las verduras pochadas y encima colocamos gambitas al gusto.
Pintamos toda la masa que no tiene relleno con huevo batido, así nos aseguramos del sellado con la segunda lámina de hojaldre.
Desenrollamos la otra lámina de hojaldre y colocamos encima de la primera. Presionamos ligeramente allí donde no hay relleno y con la ayuda de nuevo del aro cortamos -ahora sí- nuestros pastelitos. Retiramos el exceso de masa y volvemos a pintar con huevo los pastelitos. Finalmente espolvoreamos con sésamo.
Horneamos durante 15-18 minutos, hasta que el hojaldre tenga un bonito color dorado y ¡a disfrutar!
Fotos: Conlaszarpas.
